El paso del estado potosino de semáforo rojo a naranja en la emergencia sanitaria por el Covid-19, no significa relajar las medidas sanitarias y preventivas, señaló la Secretaria General del Ayuntamiento de Soledad, Yoloxóchitl Díaz López.
“A partir de este lunes estaremos en naranja, pero podemos volver a rojo, si no seguimos adoptando medidas básicas como el uso obligatorio del cubrebocas, mantener la sana distancia y seguir cada una de las recomendaciones emitidas por la Secretaría de Salud”, indicó.
Señaló que el cambio de semaforización a color naranja no significa absolutamente que la pandemia esté cesando y mucho menos que se deba caer en una relajación social, “eso podría significar el colapso hospitalario y en el peor de los casos, elevar el número de muertes en nuestro municipio y por supuesto en el estado”.
Informó que el alcalde Gilberto Hernández Villafuerte, instruyó a cada una de las direcciones municipales a seguir los lineamientos establecidos por la Secretaría de Salud, ya que por ningún motivo se pueden minimizar cada una de las indicaciones y medidas implementadas en la denominada “Nueva Normalidad”.
El semáforo naranja implica un riesgo de contagio alto del Covid-19 de acuerdo con la Secretaría de Salud; en este color se permite que las empresas de las actividades económicas no esenciales trabajen con el 30% del personal para su funcionamiento; se toman en cuenta las medidas de cuidado máximo para las personas con mayor riesgo de presentar un cuadro grave de la enfermedad y se abren los espacios públicos con un aforo reducido.
“Me parece que este cambio de semaforización es una prueba muy importante para la sociedad, si dejamos de ser responsables, regresaremos a semáforo rojo y a sus restricciones, con las consecuencias que conlleva”, concluyó.