El gobierno japonés aprobó el viernes nuevas sanciones contra Corea del Norte tras su reciente disparo de un misil balístico intercontinental (ICBM), siguiendo el llamado de Estados Unidos de incrementar la presión internacional sobre este país con armamento nuclear.
Japón ya dispone de prohibiciones al comercio y la entrada de buques de Corea del Norte, pero el viernes indicó que iba a “designar cuatro grupos y nueve individuos implicados en el desarrollo nuclear y de misiles”.
Los individuos y entidades afectadas estarán “sujetos a una congelación de activos”, indicó el vocero gubernamental Hirokazu Matsuno. La decisión japonesa llega después de que Washington pidiera “una resolución para actualizar y fortalecer el régimen de sanciones” contra Pyongyang en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU la semana pasada.
Corea del Norte realizó el pasado 24 de marzo el primer lanzamiento de un misil balístico intercontinental desde 2017. Según medios estatales norcoreanos, el proyectil era un Hwasong-17, un nuevo misil de largo alcance capaz de llevar varias cabezas explosivas, explican analistas. Sin embargo, el ministerio de Defensa de Corea del Sur aseguró a AFP que los informes de inteligencia de Seúl y Washington apuntaban a que el misil lanzado era un Hwasong-15, que Pyongyang ya había probado en 2017.
Aun así, los expertos destacaron el progreso militar que suponía el lanzamiento, que llegó más lejos que ninguno probado anteriormente por Pyongyang.
Además, su disparo causó alarma en Japón, puesto que el proyectil cayó dentro de su zona económica exclusiva.