La guerra en Ucrania cumple este jueves 561 días. En el eje de Bajmut, la contraofensiva ucraniana sigue progresando, mientras que Rusia ha reconocido haber pedido el control de Robotine, en la región de Zaporiyia.
Al menos 17 personas han perdido la vida este martes en un ataque ruso en el mercado de Konstantynivka, en Odesa. La Unión Europea lo ha calificado como “atroz y bárbaro”.
Además, Estados Unidos ha anunciado que va a mandar munición de uranio empobrecido para los tanques Abrams enviados a Ucrania. Este paquete de ayuda está valorado en 175 millones de dólares.
Rusia ha denunciado como “indicador de inhumanidad” el plan de Estados Unidos de suministrar a Ucrania armas con uranio empobrecido. “La decisión de la administración de suministrar armas con uranio empobrecido es un indicador de inhumanidad”, ha criticado la embajada de Rusia en Washington en Telegram. “Claramente, con su idea de infligir una ‘derrota estratégica’, Washington está dispuesto a luchar no solo hasta el último ucraniano, sino también a acabar con generaciones enteras”, ha añadido.
Estados Unidos también enviará a Ucrania otros 206 millones de dólares adicionales en “asistencia humanitaria” relacionada con el acceso a alimentos, agua y vivienda para las víctimas de la agresión militar rusa. Otra partida de 203 millones de dólares se destinará a “apoyar los esfuerzos de transparencia y responsabilidad de las instituciones, a promover los esfuerzos en hacer reformas clave relacionadas con la lucha anticorrupción, el Estado de Derecho y el sistema de justicia” y a investigar y perseguir los crímenes de guerra rusos.