-Por años la delegación ha sido saqueada por los alcaldes capitalinos que pichicatean proyectos urbanos, servicios y seguridad
El próximo domingo se llevará a cabo el plebiscito en el que se consultará a la ciudadanía si está de acuerdo o no con la municipalización de la delegación de Villa de Pozos, una deuda histórica con la gente del lugar.
Por años, la delegación de Villa de Pozos ha sido vista como un botín para los alcaldes que saquean sus finanzas y pichicatean proyectos urbanos, de servicios y de seguridad.
A pesar de la cercanía con la pujante Zona Industrial, Villa de Pozos sigue siendo un “ranchote” con calles estrechas llenas de baches, los habitantes no tienen agua potable y las patrullas de la Policía Municipal se aparecen sólo los fines de semana cuando extorsionan a los automovilistas.
A pesar de la falta de apoyo desde la alcaldía de la capital potosina, Pozos se ha convertido en polo de inversión y crecimiento. Para los empresarios es más rentable invertir en Pozos que en la capital, pues los precios en las avenidas citadinas se han vuelto imposibles de pagar, mientras que en pozos la ganancia es segura.
El rechazo a la municipalización de Pozos es de esperarse, pues significa que el Ayuntamiento de San Luis dejará de percibir millones de pesos en pago de permisos, licencias, predial.
En la municipalización de Pozos, el alcalde ve el fin de un negocio rentable y la reducción de puestos laborales de cientos de aviadores que no trabajan, no sirven a la ciudadanía y sólo acuden a las oficinas a checar entrada y salida.
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