– Ni cuando fue comisionado general de la Policía Federal se dio la vida de lujos y excesos que se da como alcalde de SLP
Hay un avión nuevo a la sombra de un hangar en el aeropuerto Internacional Ponciano Arriaga. Dicen que lo compró el alcalde viajero Enrique Galindo Ceballos.
Galindo se ha vuelto famoso por la enorme cantidad de viajes que ha realizado como presidente municipal de San Luis Potosí, todos con dinero de los impuestos de los potosinos, pero, acostumbrado al lujo y privacidad de los aviones de la extinta Policía Federal de la que fue jefe, se rumora que el alcalde se compró su propia nave.
Y hay motivos para creer que el jet es de su propiedad, pues la adjudicación directa de obras a sobre precio, como el puente de Himalaya, por el que los pootosinos pagarán 360 millones de pesos y el programa de “repartición” de agua con el que cobro más de 100 millones de pesos, y contratos diversos por insumos a empresas particulares que pagan jugosos incentivos a cambio de la adjudicación.
En los viajes que ha hecho a la zona Media y Huasteca, Galindo contrata, con cargo al dinero de los potosinos, un helicóptero que lo traslada en unos cuantos minutos y luego del evento en el que promociona su imagen como el mesías del PRI, regresa a la capital que no gobierna.
Pero el alcalde viajero ya se cansó de hacer fila en los aeropuertos, que ya parecen centrales camioneras, atiborrados de gente, por lo que Nueva York, Los Ángeles, Venecia, España y Ciudad de México ya lo esperan en sus hangares privados para llegar más cómodo a sus destinos favoritos.
Por lo pronto Galindo, el alcalde viajero, ya tendría avión para seguir viajando y ahora falta subir el impuesto predial en 2024 para comprar la turbina de su poderoso jet.
