Sabiendo que todos los actos de corrupción de su negra administración tendrían consecuencias, se anticipó a colocar sus piezas en el Poder Legislativo, con el fin de recibir una defensa, negociar impunidad y contar con información de acciones en su contra. Fue por eso que por la perversa vía plurinominal ubicó estratégicamente como diputado por el PRI, a su brazo derecho Alejandro Leal Tovias (también metido hasta el cuello en la corrupta pasada administración) y por MORENA a su allegado José Antonio Lorca Valle, igualmente a Edmundo Torrescano también del PRI, para así contar con tres incondicionales.
Estos diputados señalados, tienen la encomienda de defender a toda costa a la ex secretaria de salud Mónica Rangel, Daniel Pedroza ex secretario de finanzas y obviamente a la cabeza de esa mafia: Juan Manuel Carreras.
Actualmente un funcionario de la administración carrerista se encuentra preso, Jaime Pineda quien fuera Secretario de Seguridad Pública y se conocen denuncias penales en contra de quien resulte responsable por un presunto fraude en las obras del Metrobús.
Desde el Congreso del Estado, los diputados colocados por el ex mandatario van a proteger a toda costa los intereses de la cabeza y de los dos ex funcionarios ya señalados. Tanmbién podrán estar filtrando información clave y servir como intermediarios con la actual administración para poder “llegar a acuerdos” donde se devuelva gran parte de lo robado.