En lo oscurito y sin hacer escándalo, el pasado mes de febrero, la dirección general del Interapas solicitó un crédito por más de 57 millones de pesos a pesar de que, a la fecha, no ha demostrado tener la solvencia ni la capacidad económica para solventar los compromisos que tiene pendientes en materia de infraestructura y abasto de agua potable en la capital potosina, Soledad de Graciano Sánchez y Cerro de San Pedro, menos con las constantes fallas que presenta El Realito.
De acuerdo con diversas versiones, Enrique Torres, director del organismo, planteó la opción de que, luego de que el Congreso del Estado rechazara el aumento general a las tarifas de agua potable, la mejor opción para salir de los problemas que han venido ahogando al Interapas en los últimos años era contraer una deuda millonaria con la excusa de que el recurso se usaría para desarrollar obras de infraestructura hidráulica en la zona metropolitana, sin embargo, detallan, no se han dado a conocer los detalles de las obras ni se sabe con precisión cuáles ni dónde se estarán haciendo.
Si bien es cierto que el problema es nuevo, para muchos sectores de la sociedad potosina, la adquisición de un crédito no es lo más recomendable pues, como es bien sabido, el Interapas se está ahogando en deudas, en una cartera vencida que luce irrecuperable y en una larga lista de quejas y denuncias por los constantes desabastos y los cobros excesivos que se siguen dando a pesar de que los potosinos no tienen agua en sus hogares.
La solicitud del dichoso crédito se da en medio de una polémica protagonizada por el Ayuntamiento de Soledad de Graciano Sánchez que ya ha amagado en reiteradas ocasiones con abandonar al Interapas por la falta de resultados, anuncio que, incluso, ha recibido muestras de apoyo por parte del Congreso del Estado.
Hasta el momento, se desconoce en qué se invertirá el recurso que se consiguió a través de la nueva deuda.
