Ciudadanos Observando sospecha que el dinero federal se usó para financiar campañas políticas de candidatos que colocó el Gobierno del Estado en cargos de elección política.
En 2018 y 2019 la Secretaría de Salud pagó 174 millones de pesos a proveedores inexistentes en servicios y productos como; publicidad en medios de comunicación, capacitaciones, cursos, brindis, cócteles de bienvenida, servicios de limpieza, jeringas, cangureras, cilindros y utilitarios entre otras.
Ante esta situación la organización Ciudadanos Observando, quien ventiló estos gastos como parte de una primera investigación, sospecha que el dinero federal se usó para financiar campañas políticas de candidatos que colocó el Gobierno del Estado en cargos de elección política.
El vocero de mencionada asociación, Guadalupe González, comentó «no dudemos que gran parte de este dinero se desvió para la campaña del PRI en 2018. En esta primera investigación estamos hablando de 175 millones de pesos».
Agregó que la cantidad de recurso económico desviado por el estado podría llegar a los 300 millones de pesos toda vez que la actual administración realizó suplantación de identidad para comprar productos con costos inflados.
«Todas las empresas que señalamos fueron creadas a partir de finales de 2015 cuando llega Juan Manuel Carreras a la administración se crean todas estas empresas están basadas en el robo de identidad», comentó.
Refirió que el Gobierno del Estado continuó con las estafas cambiando de prestanombres ya que a quien usaron en un principio, Gabriel Salazar, ya enfrenta algunas denuncias de parte de personas afectadas.