Will Smith fue captado bailando alegremente en la fiesta de los Oscar de Vanity Fair, agitando su estatuilla de mejor actor en el aire como si nada le importara, mientras rapeaba al ritmo de una mezcla de sus propias canciones, desde “Gettin’ Jiggy Wit It” hasta “Summertime”.
Cuatro horas antes, Smith subió al escenario del Dolby Theatre y abofeteó a Chris Rock por un chiste sobre la condición médica de su esposa, y minutos después pronunció un discurso de aceptación entre lágrimas. La multitud le siguió mientras Will Smith y su familia se dirigían a la fiesta. Smith chocó las estatuillas de los Oscar con otros ganadores y se detuvo para aceptar las felicitaciones y posar para las fotos con Timothée Chalamet.