El presidente de Argentina, Alberto Fernández, abrió hoy a Rusia las puertas de América Latina en su primera visita a este país, donde fue recibido con los brazos abiertos por el jefe del Kremlin, Vladímir Putin.
“Tenemos que ver la manera de que Argentina se convierta de algún modo en una puerta de entrada para América Latina, para que Rusia ingrese en América Latina de un modo más decidido”, dijo Fernández al comienzo de la reunión en el Palacio del Kremlin. Aunque fue una visita relámpago, Fernández se mostró radiante durante la reunión y posterior comparecencia ante los medios de comunicación antes de partir rumbo a China.
Al margen de toda precaución sanitaria, Putin recibió con un abrazo a su colega argentino, con el que también coincidirá el viernes en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Beijing. “¡Bienvenido a Rusia!”, le dijo Putin, a lo que Fernández respondió con que había sido “un gran honor”. “Es una gran oportunidad. El contexto es muy favorable. A mí me parece que este es el momento en que podemos avanzar en otros terrenos. Lo que percibo es que tenemos una sociedad predispuesta para avanzar en los acuerdos”, subrayó. Fernández abogó por promover la transferencia de tecnología “para que Argentina pueda industrializar su producción primaria” con ayuda rusa y no limitarse sólo a las vacunas.
Mencionó campos de cooperación como la infraestructura ferroviaria, la extracción de gas y las energías de nueva generación como la solar y eólica.